Las elecciones presidenciales en el Ecuador se realizarán este 7 de febrero. El país se encuentra en una encrucijada económica y política, agravada por la pandemia de CVODI-19. Para estas elecciones, se presentaron un total de 16 candidaturas, un número histórico para un proceso electoral en Ecuador. Cada candidato ofrece traer soluciones al país para conducirlo a través de las crisis.
La Fanesca Política entrevistó al sociólogo ecuatoriano Patricio Pilca para conocer sus impresiones sobre la situación política del país antes de las elecciones. Aquí los que nos dijo.
Fanesca Política (FP): ¿Cómo evaluaría la gestión del actual presidente Lenin Moreno? ¿Por qué?
Patricio Pilca (PP): Una pésima gestión, sobre todo en el momento de pandemia que no pudo gestionar nada, todo lo contrario, ahí se destaparon un montón de cosas, como por ejemplo las formas de negociación política que tenía la ex ministra. Se destapó toda una telaraña de corrupción y eso dejó ver lo problemático del asunto, es decir, mientras la gente se moría, literalmente, nos estaban robando. Esto me parece sintomático porque la figura de Abdalá Bucaram nunca se ha perdido en estos veinte años, ni con la Revolución Ciudadana se logró perder el Bucaramato, es decir, los Bucaram siempre estuvieron ahí. Ahora más bien se destapó todo lo que estaban haciendo en los hospitales; entonces desde ese punto de vista muy mal la gestión.
Otro ejemplo es la educación superior. A inicios del año pasado hubo un recorte del presupuesto y luego, en plena pandemia, hubo otro recorte de presupuesto. Entonces eso te da cuenta de cómo estaban las cosas.
Han hecho lo que han querido durante la pandemia. Si los hechos de octubre del 2019 sirvieron para frenar las políticas neoliberales que quería implementar el gobierno, más bien con la pandemia y con la Ley Humanitaria hicieron posible todo eso. Entonces, por donde lo veas vas a ver que es un gobierno nefasto.
Por último, se supo que , en un momento tan grave como este, las vacunas pasarán a manos de empresas privadas. Eso te da cuenta de cómo está el gobierno.
BL: ¿Cuál es la situación del Ecuador en puertas de las elecciones presidenciales?
PP: Es una situación muy complicada. Un país en que cada vez hay más pobreza, donde el nivel de desempleo está creciendo de manera bastante rápida. Se supone que darán las cifras de desempleo, pero el director del INE renunció, eso te dice cómo están la situación.
Las elecciones son un escenario muy complicado, porque se enfrentan fuerzas correistas con fuerzas de la derecha y con fuerzas que están -o que dicen estar- más a la izquierda. Entonces, ese es el escenario: un choque de fuerzas, digámoslo así, entre distintos bandos.
BL: Estas elecciones tendrán la particularidad de presentar a 16 binomios electorales ¿Implicará esto una posible atomización del voto o es que todavía existe una marcada polarización política en el país?
PP: Pienso que si hay una atomización, aunque más bien a mi me da la impresión de que el 7 de febrero vamos a enfrentarnos a una primaria. Cuando vamos a enfrentarnos realmente a quién va a gobernar este país será en la segunda vuelta. Ahí sí se van a mirar alianzas más solventes, estrategias políticas más solventes. Ahora mismo lo que se ve son un montón de partidos tratando de canalizar sus votos. La verdad que a mí también me parece que 16 candidatos es demasiado. En la historia del país es la primera vez que se presentan esta cantidad de candidatos. Fácilmente hubiesen podido ser menos, porque hay muchos que están en la misma tendencia.
Creo que ahí la Ley orgánica de Participación Ciudadana tiene mucho que ver para dar esta facilidad a que cualquier movimiento pueda presentarse a las selecciones. Hoy mismo la discusión es que no hay partidos políticos, sino máquinas electorales qué lo que están haciendo es alquilar sus partidos para que pueda participar cualquier candidato. Éste es el problema, no ha habido ninguna reforma al código de la democracia, lo cual permite que exista el número que sea.
Sólo por colocar un ejemplo: el candidato César Montúfar estaba participando para alcalde en la alcaldía de Quito, pero perdió. ¿Qué le hace pensar que ahora puede ganar en las elecciones nacionales? Y así dices: “ ¡pero estos señores no tienen ninguna posibilidad!” y sin embargo se han lanzado. Por eso yo digo que en la segunda vuelta es que realmente se va a ver las estrategias políticas de bando y bando.
BL: ¿Recoge alguna de estas candidaturas las demandas de la población efectuadas en las movilizaciones sociales de octubre de 2019?
PP: Ninguno de los 16 binomios recoge realmente esa fuerza movilizadora que estuvo movilizándose durante once días. Si se quiere, lo más cercano sería Yaku Pérez, aunque él tuvo algunos conflictos al interior de Pachakuti y de la CONAIE que van a jugarle en contra, porque ya se empieza a notar fraccionamientos. Esto sobre todo porque en las mismas elecciones primarias de Pachakuti hubo transfugio; al final Yaku Pérez terminó ingresando casi por la tangente de todo lo que se pensaba. El candidato con más opciones, dicen las personas que estuvieron en las asambleas de la CONAIE, era Leónidas Iza. Lamentablemente este juego de poderes que tiene la CONAIE, que es una organización que alberga alrededor de 900 organizaciones a nivel nacional, tienen ahí todo un choque de fuerzas.
Sin embargo, para entender lo que estoy diciendo, sobre la elección de la CONAIE y su directiva, el núcleo duro de Pachakuti terminó eligiendo a Yaku Pérez . Eso desde el mismo instante causó fraccionamiento, cierto fraccionamiento que cualquier rumor que se escuche levanta un montón de polvo, un huracán. Para muestra un botón: el 24 de enero sacaron una noticia donde Vargas, el presidente de la CONAIE, se encontró en un mercado con el candidato Arauz. Este encuentro ha dado para un montón de noticias sobre si la CONAIE va a apoyar a Arauz, si eso significa el desplome del proyecto de Yaku, o con quien el movimiento indígena está; un sin número de cosas que han ido pasando.
Sobre esta pregunta podríamos pasar conversando mucho más tiempo, porque me parece que ahí está el núcleo de la representatividad de octubre de 2019, que no ha logrado ser capturado y que de alguna forma exige a la misma CONAIE a abrirse a nuevas propuestas de los jóvenes, de las mujeres, ecologistas. En fin, un sinnúmero de temas que surgieron en octubre del 2019 no se ve en las propuestas de ninguno de los candidatos y quien se supone que iba a ser el candidato que te representa, tampoco.
Entonces, ahora más bien lo que está funcionando es una especie de fuerza orgánica que va a votar por Yaku Pérez, pero de forma orgánica, aunque ahí no hay ningún halo de satisfacción. Además, Yaku Perez en el 2017 apoyó a Lasso directamente. Luego de eso tienes como ciertos temores, creo que no son infundados; la gente lo tiene muy bien ubicado y regresa al imaginario esas cosas en este momento de las elecciones.
BL: Algunas encuestas realizadas muestran que los tres candidatos con mayores posibilidades de concentrar el voto son Andrés Arauz, Yaku Pérez y Guillermo Lasso. ¿Podría hacernos una breve evaluación de cada uno?
PP: Respecto a las encuestas, dicen las más certeras que primero estaría Arauz, el candidato del correismo, luego estaría Lasso y tercero Yaku Pérez. Todo esto con un margen de indecisión de más o menos el 40%, es decir, que todavía hay candidatos que piensan que ese 40% lo pueden capturar. Yo la verdad pienso que quién va a ingresar a la segunda vuelta son Arauz y Lasso, creo esto por las fuerzas que se han ido tejiendo y como se han ido dando las cosas últimamente. Entonces, en el caso de Lasso tienes que la derecha está apoyándolo, aunque cada vez que habla dice alguna estupidez como esto de “ les voy a bajar el sueldo a $120 “. Si es que uno tomara al pie de la letra lo que dicen, dirías “ ¿para que voy a votar por ese señor? “, pero la derecha se ha ido fortaleciendo de alguna manera con este gobierno y creo que Lasso ha estado ahí, en todo el gobierno de Lenin Moreno.
Arauz se presenta como esa contra-fuerza que de alguna manera quiere revivir al correismo. Arauz ha estado implicado muy poco en política, entonces conoce muy poco y es muy difícil que se le pueda difamar por los medios tradicionales; es como la cara fresca del correismo. Me parece que lo que él necesita es fortalecer su discurso: te das cuenta que no es Correa. Él ha insistido muchas veces que no será: “gana Arauz, gobernará Correa “, como esa vieja fórmula peronista de que ” gana Cámpora y quien gobierna será Perón”. Se han cuidado mucho de eso, pero se sabe que Correa está ahí impulsando. En este sentido, de alguna forma Arauz es quien ha ganado más peso.
Entonces, Lasso tiene un voto duro de la derecha, Arauz tiene un voto duro del correismo que sigue ahí, no se ha perdido. Respecto de Yaku Pérez, yo personalmente no le apuesto mucho, porque en las mismas organizaciones indígenas tienen miedo a votar por él, no le tienen mucha confianza y además, esto es un dato histórico, Pachakuti desde 1990 nunca ha logrado superar el 10%.. Las anteriores elecciones sacaron el 3%, menos del 3% en realidad. En el 2017, cuando fue candidato a presidente Alberto Acosta, hicieron todo una unión de algunos sectores de izquierda. Esto te dice que, al menos históricamente, no van a lograrlo. Además, estructuralmente la sociedad ecuatoriana es muy racista, entonces no le va a dar chance a un indio, aunque sea mestizo venido aindio.
Entonces es muy complicado, ni siquiera con Leónidas Iza si hubiese logrado ganar. Más bien lo que Ies iba a generar era una mayor representatividad en la Asamblea, es decir, muchos asambleístas de Pachakuti en la Asamblea. Eso iba a ser un momento interesante, porque se iba posicionar como una fuerza desde el movimiento indígena que podía proponer cosas. Ahora, yo con Yaku no veo eso; va a ser un doble golpe: el golpe de no ganar y el otro golpe en la Asamblea. Eso serían mis argumentos para decir que a Yaku no le va a ir bien, espero equivocarme y que el día de las elecciones Yaku Pérez pase a segunda vuelta.
BL: ¿Cuáles son los problemas mas acuciantes que tendrá que enfrentar el nuevo gobierno? ¿Cree que será capaz de afrontarlos?
El siguiente gobierno lo va a tener muy complicado, porque el gobierno de Lenin Moreno le está dejando cosas aseguradas con el FMI. Lo primero que tendrá qué hacer, cualquiera que gane, es sentarse con el FMI y arreglar los préstamos que nos van a dar hasta fin de año. Ese va a ser un primer gran problema. Lo segundo es que va a tener que enfrentar, porque este gobierno no lo hizo, el problema de las vacunas. Se supone que en marzo, cuando sepamos quienes van a segunda vuelta, recién ahí se vacunará de forma masiva.
Creo que lo mejor que nos puede pasar es que estemos organizados, porque creo que, en cierta medida, el estar organizados nos va a ayudar a las personas de pie y a las personas que no estamos militando por ningún partido político en las elecciones, a poder resistir ese embate del nuevo gobierno. Ya sea el gobierno de Lasso, que seguramente va a ser más radical, o el gobierno de Arauz, aunque quizá en menor medida, terminarán presionando a la sociedad. Entonces va a ser muy complicado después del 24 de mayo que es cuando se posesiona el nuevo presidente.
Al nuevo presidente le va a quedar muy complicado, este nuevo escenario se le viene difícil. Quizá, y eso es una especulación, el tema de las vacunas para el COVID-19 se le facilitaría un gobierno como el de Arauz, porque se supone que Argentina va a fabricar una de las vacunas y, siendo que están en la línea progresista, podrían ayudarse. Eso no sucedería con Lasso, él ya dijo que va a privatizar la vacuna, es decir, que quien tenga plata se va a poder vacunar; lo ha dicho abiertamente, sin ningún tipo de tapujos.
SOBRE EL ENTREVISTADO
Patricio Pilca (Ecuador) es sociólogo por la Universidad Central del Ecuador, Magíster por la Flacso-Ecuador y Candidato a doctor por la Universidad de Buenos Aires. Actualmente es profesor de la Facultad de Comunicación Social en la Universidad Central del Ecuador.
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